miércoles, septiembre 08, 2010

“El legado de las cenizas”, calentamiento global y cambio climático



Desde ya hace algún tiempo, se observan cambios en patrones del clima, y por consiguiente cambios en las estructuras de los ecosistemas; problemas que nunca antes se habían visto, hoy parecen más frecuentes: escasez de agua, aumento de temperaturas, desertificación, aumento de precipitaciones, conforman una larga lista de sucesos a los cuales no estábamos acostumbrados.

Como el culpable de estos cambios en el equilibrio “normal” del planeta, se señala al calentamiento global; fenómeno consistente en el aumento de la temperatura del planeta explicado por el efecto invernadero, en donde la contaminación de tipo antropogénica se señala como factor relevante al destruir la capa de ozono (la cual protege de la excesiva radiación solar) y estableciendo una suerte de barrera (gases de invernadero) la cual no permite que la radiación normal sea reflejada al espacio, produciendo el aumento de temperatura.

En si aumento de temperatura y las consiguientes variaciones no resultan ser el real problema, puesto que se ha establecido que en épocas pasadas, estas habían ocurrido; lo que realmente altera a la condición habitual, es la velocidad a la cual estos cambios se suceden. El aumento de la producción a partir de la revolución industrial, ha llevado a que el desarrollo de la civilización se sustente en el uso irracional de energía; con esto se ha logrado aumentar la “calidad de vida”, pero a un costo muy alto. El estilo de vida moderno, establece tanto al consumo como al individualismo y competencia, como las claves para el desarrollo personal; esta falta de conciencia tanto entre las mismas personas como con su medio ambiente ha resultado ser catastrófico. Para satisfacer la demanda de diversos productos y mantener la calidad de vida, se ha inclinado por establecer políticas de desarrollo basadas en el aumento de la producción y el respectivo consumo; en este modelo no se establece el costo real de un producto, el cual no incluye el impacto ambiental que este produce; por ejemplo el costo de una hamburguesa (5-15dolares) no incluye, los litros de agua usado en el pan, tomate, vegetales, carne; ni el proceso de manufactura y transporte.

Las dimensiones de la sobreproducción son gigantescas; la huella ecológica (cantidad de tierra que requiere un ser humano para su sostenimiento) se ha elevado de 1.9 hectáreas/por persona a 2.3 promedio, siendo la de los estadounidenses 9.57; 5 planetas serían necesarios si todos en la tierra consumiéramos en esa medida.

Los efectos del aumento de temperaturas hoy en día son más evidentes; este proceso puede ser de tan solo una pequeña variación en la escala de temperatura, pero debido a la fragilidad del equilibrio natural, esto desencadena cambios que afectan a toda la población. El aumento de +1° Centígrado provoca cambios notorios en el clima tropical, haciendo más frecuentes las inundaciones y los huracanes, al igual que las sequías y escasez de alimentos. El aumento de +2° provocaría un notorio desequilibrio en el océano, alterando sistemas físico-químicos y por consiguiente a las tramas tróficas (relaciones inter.organismos, productores- consumidores) y la biodiversidad (y toda actividad relacionada a ella. Estos son solo ejemplos de innumerables desajustes en los sistemas ecológicos.

Ante esto es de real importancia que la población pueda entender el problema y establecer planes de desarrollo que incorporen la variable ambiental como un punto obligatorio para lograr cambios sustanciales, y también planes remediales que justifiquen el rumbo arcaico y petróleo-dependiente que esta sociedad sigue (influenciada por presiones económicas de grupos de poder : corporaciones-bancos).

Cosas tan simples como cambios de hábitos y lograr la diversificación de la matriz energética y la eficiencia en el uso de energía, pueden hacer cambios notorios.

Mientras prime la visión del ser humano como un ente no incluido en un sistema ecológico mundial, no se pueden esperar cambios sustanciales ni una mejora en la calidad del mundo que se les herede a las futuras generaciones.

La devastación de biomas, el aumento de la codicia empresarial, la falta de una visión integrada y de futuro, la ceguera ante la búsqueda de la real sustentabilidad, la inherente autodestrucción….. Ponen en duda la cualidad (que se ostenta con tanto orgullo antropocéntrico) que nos separa de los demás animales: la inteligencia (razonamiento) la cual se define como la capacidad de adaptase a los cambios.




1 comentario:

Anónimo dijo...

bien dbuena informavción carnal. XXX HASTA SIMPRE